miércoles, 13 de abril de 2011


La tarde ha caido y es fria o yo estoy algo destemplada. Estoy acostumbrada a las pruebas del destino, Creo incluso que todo el que se acerque a mi está expuesto a ello.
La primavera ha llegado y ya no tengo tanto frío por la noche aunque mi gata sigue acurrucándose en mi regazo.
Sigo tomandome mi te de jazmín todas las tardes y aun mantengo mis manias en casa, esa de la tapa y las puertas cerradas y las mesas caóticas pero dentro de un orden.
Por la mañana me tomo una taza de colacao y reviso mi correo.
Hay cosas que las hago con desidia, creo que la mayoría de las veces cambio la forma de hacer las cosas para no aburrirme y caer en la desazón.
La ropa por ejemplo que me pongo para estar por casa siempre tiene un lugar donde acabo apilando ropas del día anterior, pero en ocasiones cambio ese lugar a otro.
Cuando me pongo en el ordenador por las mañanas el sol va danzando de un rayito a otro y de un lugar al siguiente de manera progresiva y parece que juegue con mi gata mientras ella se acomoda y acomoda sus ganas frente al siguiente rayito de sol que se estaciona por un rato en la mesa de oficina,
A veces la desolación puede conmigo y yo me planto furiosa frente a ella mirandola frente a frente y planteandole un nuevo desafío. Entonces miro a lo lejos del pasillo y le digo " sal vil de esta casa, que te coman los diablos" . Entonces la soledad vuelve a ser mia y mi casa vuelve a tener una dueña que la cuida.
La soledad no está tan mal. Es escogida. La desolación no...
Yo en soledad juego con las palabras siempre que ellas quieran jugar conmigo. Ordeno trastos y cajones, tengo una continua batalla con la cesta de la ropa sucia y me encanta ponerme música a tope mientras doblo calcetines.
Cuando la noche cae tengo mas tiempo para pensar. Ya he vuelto del trabajo y hago los mismos movimientos cuando llego a casa; limpiarme la cara, quitarme las lentillas, cambiarme de ropa y todo el resto de cosas hasta que descanso y me hago un cigarrito.
Es entonces cuando llega el momento mágico y me pierdo entre los personajes de mis libros y los de alguna serie mala de televisión. Es mucho mejor hacerlo de noche, la mente empieza a descansar y es el mejor momento  para ser creativos.
A veces no me llega la inspiración y arrastro la pena de una depresión como una idiota y los demás que ven como me desmorono se descolocan.,,, vaya,,, tu siempre sonriente y fuerte ante la vida.,,,,
Y yo me rio, no me queda otra.
Una vez leí : "en los viajes introspectivos mejor pasar por los caminos transitables"
El que lo escribió probablemente me entendería.
Lo mas transitable es la vida cotidiana y bueno, en ocasiones me pesa no lo voy a negar pero tengo que
ser consciente de que paso por una grave depresión, tengo que pasar por los caminos transitables y
eso me obliga a desechar pensamientos del ayer o del mañana para vivir el momento.
Uno no puede decaer en el momento porque el momento es la puta reallidad y ella no perdona
ni transige, ella simplemente te deja pasar con un pase de torero y probablemente una banderilla
en la mano para ir a matar.
¿Y sabes que te digo? Que me da igual si me mata o no, es como si me hubiera echo inmune a cualquier zancadilla. Supongo que en mi momento de viaje introspectivo prefiero mirar los pequeños detalles.
Una asimila las pequeñas tonterías con mas facilidad, una cama limpia, el olor a croassant recién hecho, una sonrisa de mi sobrina Lucia, ver como los personajes de mi libro tienen vida propia, tratar de sentirme guapa todos los días aunque me cueste conesguirlo.
Cuando una llega al límite y vuelve para contarlo necesita todo un sistema complejo para explicar lo que ha vivido y sobre todo como vive las mismas cosas sencillas que el resto hace.
Al fin y al cabo se urgue lo que se urgue la herida hay de quienes tratamos de tener entereza y lo conseguimos,
A veces  aunque el alma este llorando hay que tener claro que hay que sonreirle al sol y acariciar a tu gata antes de que se vuelva mas salvaje de lo que tu has conseguido volverte contra la sociedad.
Huelo a bocadillo de calamares, me voy no vaya a ser que me pierda un camino transitable......

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